miércoles, 11 de septiembre de 2013

La Olimpiada de la Hostia

A Pío XII se le acusó de no hacer algo más contra la barbarie nazi sufrida por los judíos y, además, de ser tan anticomunista como los fascistas, lo que está claro es que su anticomunismo se vio acentuado cuando terminó la guerra y hubo posibilidades de que ganasen en las elecciones parlamentarias de Italia. Pío XII declaró que cualquier italiano católico que apoyara a los candidatos comunistas en las elecciones generales italianas del 1948 sería excomulgado e instó a que se apoyase al Partido Demócrata Cristiano de Alcide de Gasperi que, a la postre, resultaría ganador. Además, al año siguiente autorizó a la Congregación para la Doctrina de la Fe a excomulgar a cualquier católico que militara o apoyara al Partido Comunista. Su acercamiento a la otra potencia, EEUU, era evidente y para ello se sirvió de Francis J. Spellman, arzobispo de Nueva York y amigo personal del Papa. Así estaban las cosas…
En 1952, en plena Guerra Fría, se celebró el XXXV Congreso Eucarístico Internacional en Barcelona donde, según crónicas de la época, se congregaron casi un tercio del Sacro Colegio Cardenalicio, más de doscientos cincuenta obispos de todo el mundo, quince mil sacerdotes y dos millones de fieles. En este Congreso es donde el arzobispo Spellman soltó aquello de…
No hay en la hora mundial actual otra elección: o comunión, o comunismo.
En una de las multitudinarias misas que allí se celebraron se llegó a dar la comunión a 500.000 fieles… y de aquí nació llamarle la Olimpiada de la Hostia.
XXXV Congreso Eucarístico internacional de Barcelona
XXXV Congreso Eucarístico internacional de Barcelona